En la Feria Libre Víctor Domingo Silva, Las Quintas, las mujeres demuestran día a día que su labor va más allá de sostener un puesto de venta; ellas sostienen comunidades enteras con su trabajo, su esfuerzo y su energía diaria. Conscientes de que el cuidado de los demás requiere, fundamentalmente, aprender a cuidarse a sí mismas, ha concluido exitosamente el proyecto «Mujeres Feriantes en Equilibrio y Autocuidado».

Financiado este año por el Fondo de Fortalecimiento, esta iniciativa buscó, durante su ejecución, fortalecer el bienestar emocional de más de 25 mujeres feriantes. El proyecto se materializó a través de una serie de talleres dedicados a la salud mental, el autocuidado y la creación de espacios de encuentro seguros y de confianza.

Úrsula Mix, Seremi de Gobierno de la Región de Aysén, destacó la relevancia de este tipo de iniciativas que ponen el foco en el bienestar integral de las trabajadoras: “Este proyecto es fundamental porque reconoce una realidad que muchas veces pasamos por alto: para poder cuidar a nuestras familias y comunidades, primero debemos cuidarnos a nosotras mismas. El autocuidado no es un lujo, es parte esencial del trabajo digno. Cada encuentro fue una oportunidad para que más de 25 mujeres pudieran detenerse, reconocerse y construir redes de apoyo y camaradería entre compañeras, fortaleciendo no sólo su salud mental, sino también el tejido social de nuestra feria y nuestra región”.

La iniciativa subraya la importancia de integrar la salud mental y el autocuidado como componentes esenciales del trabajo digno y sostenible, reconociendo el esfuerzo invisible que a menudo recae sobre las mujeres trabajadoras.

Marta Soto, presidenta de la Agrupación de Mujeres feriantes Víctor Domingo Silva, comento estar “Muy agradecida de la Seremi de Gobierno de que nosotros, como Feria Las Quintas, pudimos postular a este proyecto y beneficiar a 26 mujeres que hicimos el taller de autocuidados”.

En tanto, Enaldy Alvear, participante del proyecto, indicó: “Estoy orgullosa de haber podido participar en la actividad de autocuidado que se realizó. El poder participar en esta actividad me ayudó a auto valorarme, a revalidarme como persona. El poder hacer lo que estoy haciendo ahora, de hablar en público, que se me dificultaba harto, pero el poder haber estado en confianza con mis compañeras, habernos conocido más y la forma en que se llevó la dinámica fue tan particular que ayudó a que esos temores de repente que tenemos de expresarnos se fueran desvaneciendo, y eso se agradece mucho porque no siempre tenemos la posibilidad de expresar lo que sentimos de una forma clara”.

Con este proyecto, se puso en valor el rol del Fondo de Fortalecimiento como un apoyo concreto al bienestar de las organizaciones sociales. La iniciativa dejó aprendizajes, redes de apoyo y espacios de contención que fortalecen a las mujeres feriantes, demostrando que el autocuidado colectivo es clave para construir comunidades más fuertes y solidarias.