«Para que la cultura y los contenidos lleguen de manera adecuada a las audiencias, es muy importante que los espacios cuenten con planes de gestión. Esto ordena el trabajo cultural y sostiene una hoja de ruta». Así expone el Seremi de Culturas Aysén, Felipe Quiroz, la importancia del trabajo que el programa Red Cultura del Ministerio de las Culturas está desarrollando con los espacios autogestionados en Puerto Aysén, Casa Alerce y Espacio Abierto. Quiroz dice que «buscamos fortalecer su gestión y favorecer una parrilla programática atractiva y un plan de gestión que respalde todo el trabajo que hay detrás de las iniciativas».

Red Cultura, programa alojado en la Unidad de Ciudadanía Cultural de la Seremi de Culturas Aysén, trabaja la vinculación entre la comunidad y el sector cultural, acerca a los gobiernos locales y relaciona los espacios culturales con los habitantes de cada localidad.

Para Pedro Urbano, parte del equipo de Casa Alerce en Puerto Aysén, este proyecto piloto  y el trabajo con Red Cultura «fue muy enriquecedor para nuestra organización. Para el centro cultural contar con un plan de gestión nos permite visualizar y proyectarnos en el tiempo, en este caso, cuatro años de plazo; también ordenarnos, saber para dónde vamos y lo que necesitamos; también tener conciencia de lo que hemos hecho y lo que hemos logrado. Y por otra parte, y creo que es lo más importante, también nos permitió generar una herramienta que surge a partir de las  comunidades. Tuvimos distintos encuentros con distintos grupos: adultos mayores, públicos cautivos, colaboradores de la casa, establecimientos educacionales, en donde logramos identificar las necesidades y las expectativas, la visión que tienen ellos en miras del desarrollo artístico cultural acá en Puerto Aysén».

Jimena Muñoz, de Espacio Abierto, piensa que «la importancia de Red Cultura radica precisamente en que ellos fueron quienes nos descubrieron, ellos descubrieron la existencia de este centro cultural autogestionado. Al principio no comprendíamos toda la relevancia de contar con un plan de gestión porque todo era para nosotros nuevo, pero con la participación y el desarrollo del instrumento nos dimos cuenta del impacto que este genera. Agradecemos que nos hayan hecho sentir que no estamos solos como artistas.»