Difusión de la memoria: agrupaciones de derechos humanos de Aysén son clave en la esfera cultural y artística

En Aysén, Trinchera Utopía Biblioteca y la Agrupación de Derechos Humanos de Coyhaique se han convertido en referentes para el tejido social, algo que posibilitó la difusión de la memoria de un periodo complejo en la historia chilena.

Cada año las agrupaciones de derechos humanos de la región, sociabilizan la memoria histórica y colectiva de un proceso que marcó al país y que, en medio de un escenario cambiante, lograron insertarse en el cúmulo ciudadano con el objetivo de concientizar a través de la programación de actividades en espacios públicos.

Un accionar constante que dio sus frutos previa articulación de esfuerzos entre habitantes, agrupaciones e instituciones para conseguir hitos de gran envergadura, como fue lo acontecido en la Segunda Comisaría de Puerto Aysén, declarada Sitio de Memoria bajo la ley 17.288 hace algunos meses.

Esta coordinación de agentes civiles posiciona a las organizaciones en un “estadio de gestión más avanzado, de cara a nuevos desafíos como lo son la obtención de comodato”, señaló Begoña Olivares, en representación de la Unidad de Cultura, Memoria y Derechos Humanos, del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.

Añadiendo que el quehacer en la zona “es considerado como referente para todo el país, debido al tenaz trabajo de memoria y promoción de los derechos humanos sostenido por las agrupaciones, como también el constante interés por seguir especializándose en torno a la gestión y difusión de los sitios de memoria”.

Por otra parte, desde la cartera local, el seremi de Culturas Aysén, Felipe Quiroz, valoró el continuo compromiso. “El trabajo incansable que han hecho tanto para relevar la memoria histórica y también la importancia de hablar de derechos humanos, para nosotros como Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio es fundamental, porque a través de ellas podemos proyectar una memoria para el futuro, una memoria donde se cimiente un camino de justicia, de verdad y de reparación y con una impronta de no repetición”.

Esto trae a la palestra la puesta en marcha de “Aysén, transitando por la memoria”, proyecto financiado por la Seremi de Culturas, a cargo de la Agrupación de Derechos Humanos de Coyhaique, cuya carta de navegación consideró el conversatorio: “Importancia de los Sitios de Memoria en la promoción y defensa de los derechos humanos”. Cabe destacar que la instancia implementada en 2022 contó con la participación de Marcelo Acevedo, abogado y coordinador de la Red de Sitios de Memoria; y Sandra Piñeiro, académica e investigadora en Memoria de Niñez en Dictadura.

Para complementar las acciones, la agrupación hizo una serie de intervenciones artísticas, además de la tradicional “Ciclo ruta de la memoria”, acorde a la premisa de visibilizar infraestructura que en tiempos de dictadura fuera utilizada como reciento de tortura. “La idea de realizar este proyecto nace más que nada, de la continuidad que tenemos cada año”, expresó María Vera, presidenta de la organización, aclarando que la declaración del Sitio de Memoria es relevante para los esfuerzos del equipo.

“Los sitios de memoria nos recuerdan lugares donde hubo violaciones a los derechos humanos y es muy importante no solo para quienes fueron víctimas, sino también para la comunidad que esos espacios permanezcan y sean visibles en el tiempo para que no vuelvan a cometerse los mismos actos horrorosos”, puntualizó Vera.

Un trabajo similar y paralelo al de la Agrupación de Derechos Humanos de Coyhaique, desarrolló Trinchera Utopía Biblioteca. “El lenguaje artístico nos facilita la comunicación de las memorias de dictadura, nos abren al diálogo, y a una reacción y actualización desde lo personal y lo colectivo”, sostuvo Gloria Hernández, representante legal de la organización, la cual ha entablado un quehacer notable en la circulación de la memoria, mediante jornadas formativas con talleres de serigrafía y arpillera, en el proyecto “Con hilos de memoria bordamos justicia”.

Respecto al financiamiento, proveniente de la Seremi de las Culturas, la representante legal sostuvo: “nos ha ayudado a organizar nuestro trabajo, realizar investigación, entrevistas, cartografía de la memoria, audiovisuales (vídeos) para compartir con la comunidad”, cerró.

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