Por octavo año consecutivo, la organización cultural comunitaria Malotun Ortiga desarrollará en la ciudad de Coyhaique, capital de la Región de Aysén, “The Dark Side of the Sur”, instancia que articula diversos elementos para levantar un escenario que busca acercar a la música y sus creadores con el público a un nivel más profundo del que puede resultar la rutinaria acción de asistir a un concierto.

Al respecto, Víctor Cabrera, director de la iniciativa, señala: “Sería iluso pretender que sólo por ser acústicos, o semi acústicos, los conciertos puedan ser atractivos. Por eso, incorporamos elementos identitarios para enriquecer la propuesta: las gráficas son siempre diseñadas con fotografías panorámicas de Coyhaique, contextualizando e invitando al público a sentirse parte del universo físico donde se desarrolla el evento; la escenografía contiene antiguas cocinas a leña, sacos de la industria de la lana y otros elementos característicos del habitar en Aysén, conviviendo en una instalación lumínica que evoca una atmósfera de familiar contención. Los conciertos también integran en el escenario obras de artistas visuales que se desenvuelven en  distintos estilos, con variados soportes y materialidades (serigrafía, acrílico, óleo, ilustración textil, fotografía, telar, arpillera, esmaltado, etc.), fomentando un interesante cruce de disciplinas. Los conciertos consideran un componente de mediación artística a través de entrevistas a las bandas entre las canciones, potenciando la conexión del público y la música”. Con participación de populares bandas locales, como Avizmo, Oblicua Tara y Los Trapananda, el escenario también se ha abierto a recibir música docta, tradicional y de pueblos originarios, como fue la participación de Beatriz Pichi Malen; habiendo contado también con la presencia de otros invitados de alcance nacional: Juanito Ayala, La Chinganera, Evelyn Cornejo y La Brígida Orquesta, por citar algunos nombres.

Cofinanciado por el FNDR del Gobierno Regional de Aysén y el PAOCC del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, la programación 2023 incluye artistas regionales, como Alonso Núñez, cantautor oriundo de Puerto Aysén con una dilatada trayectoria nacional e internacional, que se presentará en formato trío, acompañado por obras del fotógrafo Fabián España Rivera; y los coyhaiquinos Cepa Funk, agrupación de corta data, pero con muchos seguidores entre el público local, junto a cuadros de la artista visual Patricia Moya. Además de los anteriores, se presentará la banda santiaguina Plumas, rock/pop de muy fina factura, también relativamente nueva, con una carrera explosiva y un importante número de fanaticada en todo el país, quienes compartirán escenario con parte de la Colección Textil del colectivo de artesanas Ribera de los Lagos, del sector lago Pollux, desarrollada colaborativamente con la Organización Pulso Austral. Para la clausura estará Katy Erices junto a su banda, cantante y compositora angolina que cultiva lo que medios especializados han denominado ska-cebolla, estilo que combina sonidos cercanos a The Skatalites, con una impronta vocal y líricas muy en la línea de la recientemente fallecida Cecilia “La Incomparable”, lo que se fusionará, esa última velada, con las arpilleras de creación colectiva en torno a los derechos humanos que desarrolla Biblioteca Trinchera Utopía junto a diversas comunidades de la región.

A lo anterior, se suma una actividad formativa satélite, donde un panel de profesionales del área cinematográfica, de Aysén y otras latitudes, estarán compartiendo sus experiencias en el conversatorio “Registro audiovisual de música en vivo”.

La invitación a la comunidad es a participar de las actividades, todas gratuitas. Las melodías y el arte visual estarán presentes en el auditorio del Museo Regional de Aysén durante la segunda quincena de agosto, sonando en formato acústico y orgánico, compartiendo y dialogando con el anfitrión de siempre, Marco Canto, en una nueva entrega de lo que es considerado por muchos como el escenario musical más relevante de la Región de Aysén.